En el contrato siempre debe aparecer la manera en que se van a pagar las mensualidades de la renta, la fecha límite de pago y dónde se hará. Muy importante, siempre debes solicitar el recibo de pago.
Es importante que esto quede establecido en el contrato, de lo contrario una de las partes puede argumentar que intentó abonar el dinero o cobrarlo y no fue posible.
Algunos anuncios de renta de vivienda son llamativos por su bajo precio. Después, al consultarlo, resulta que el arrendatario debe pagar todos los gastos junto con los del agua, la luz, la basura, la seguridad, el mantenimiento, etcétera.
La ley da completa libertad al propietario para que introduzca en el contrato cláusulas en las que atribuya al inquilino el pago de todos estos servicios, pero es conveniente que antes de firmar el arrendatario calcule cuánto va a tener que pagar por estos impuestos que, en principio y si no se establece lo contrario, le corresponderían al dueño del inmueble.
También hay que evitar, en la medida de lo posible, abonar de manera anticipada muchas mensualidades al alquilar la vivienda, es mejor negociar y no quedarse sin un dinero que puede ser imprescindible.
Recuerda que en el contrato también debe venir estipulado el aumento anual de la renta.
FUENTE: GUSTAVO GUZMAN.