Poner en venta una propiedad genera incertidumbre en temas como, ¿cuál es el precio correcto?, ¿qué debe contener el contrato?, ¿cuál es el proceso legal? Para hacer frente a estos generadores de estrés, la recomendación es que te apoyes en un asesor inmobiliario profesional. Ellos te ayudan a vender tu propiedad de manera segura y al mejor precio.
El primer consejo es que elijas un asesor profesional, de lo contrario pones en manos inexpertas tu patrimonio.
¿Cómo te ayudan?
No se trata de contratar a alguien que ponga un rotulo que diga se vende y ya. Un profesional inmobiliario siempre te asesorará en temas de vital importancia para llevar a buen término una operación inmobiliaria.
El primer apoyo es fijar juntos el precio de venta. Éste debe ser competitivo, y estipularse con base en un estudio de mercado comparativo y evitar tener en venta un inmueble invendible por precio alto o un remate por precio bajo.
También te asesorará de principio a fin en el tema legal, es el más importante en una operación inmobiliaria. En este punto debes tener cuidado de quien otorgue esta asesoría sea abogado o este respaldado por alguno. La documentación, las ofertas, los contratos de compraventa y el trámite notarial, comprenden la asesoría legal que deberá garantizarte el profesional inmobiliario que contrates.
Obviamente el asesor inmobiliario que te atienda deberá estar debidamente capacitado en otros temas como ventas, atención a clientes, servicio de calidad, arquitectura, negociación, garantías en contratos, para cuidar tus intereses y concluir exitosamente la operación.
Los profesionales inmobiliarios saben que es imprescindible hacer una buena promoción del inmueble y siempre estarán dispuestos a invertir cantidades considerables de dinero y recursos para publicar tu inmueble a través de los medios necesarios para venderlo y no colocar solamente el letrero de “se vende”.
Un buen asesor inmobiliario cuida el patrimonio de sus clientes como si fuera el suyo propio, por lo tanto se compromete con sus clientes firmando un contrato para promover el inmueble por un tiempo determinado. Ahí se establecen claramente las obligaciones del prestador del servicio, por el contrario si alguien te propone vender tu inmueble sin firmar un documento, deberás asumir que dicha persona no se compromete a nada, sólo está pensando en cobrarte.
El rango de honorarios lo define cada inmobiliario o empresa, la comisión oscila entre el 4% y 6% del precio final de venta. Este porcentaje varía de acuerdo a la calidad y cantidad de servicios que otorga cada empresa, por lo tanto, lo más barato no siempre será lo mejor.
Toma en cuenta que un profesional inmobiliario siempre cobrará sus honorarios más el IVA correspondiente, si alguien no te lo cobra, el impuesto ten mucho cuidado.
Cuando se trata de poner en manos de un tercero tu patrimonio debes evaluar la seguridad y profesionalismo que te brinda y no sólo cuánto te cuesta.
Por Pedro Trueba